El pasado lunes 9 de marzo se dio a conocer la lista de las bandas que integraran el cartel de uno de los festivales más importantes en Latinoamérica, el “Vive Latino”.
Esperaba con ansia ese momento, desde varios meses antes me encontraba haciendo una lista de las posibles bandas que serian parte del evento, de hecho en repetidas ocasiones apostaba junto a mis amigos las bandas más sobresalientes.
Este año el festival festeja su decimo aniversario, y no porque se hayan hecho 10 “Vives Latinos” seguidos, sino que en 1999 se realizó el primer evento, de un solo día, y con las mejores bandas de aquellos tiempos.
El evento ha evolucionado de tal manera que ahora ya son dos días llenos de música, fiesta, sudor y cansancio apasionante. Pero como fan de este festival, esperaba que esta misma evolución continuara año con año, pero por lo que veo, el “Vive Latino” se quedó estancado.
Obvio no podemos comparar a este festival con eventos como el “Glastunbery”, “Coachella”, “Rock in Rio”, etc., ya que ellos cuentan con una mayor infraestructura tanto escénica como económica.
Pero los fans del “Vive Latino” ¿No nos merecíamos a un Manu Chao para festejar el decimo aniversario como es debido? En los últimos cinco años (tal vez es un poco más), los asistentes asiduos a este festival han solicitado con fervor la presencia de este gurú de la música, y ¿Creen que les han hecho caso?
No quiero discriminar a las bandas que estarán presentándose en dicho evento, porque en realidad son muy buenas, destacando a los Fabulosos Cadillacs, Andrés Calamaro y a Gogol Bordello.
Pero desde los últimos cinco años las bandas que están en el cartel son las mismas: Zoé, Bengala, División Minúscula, La Gusana Ciega, Fenómeno Fuzz, Instituto Mexicano del Sonido, Los Bunkers, etc., todas estas bandas me gustan mucho, pero son las mismas que han desfilado en los últimos tiempos.
Aunque bueno, después de cuatro años seguidos Austin TV ya no tocara, o eso parece hasta el momento.
En resumen considero que este festival necesitaba un aire fresco, novedoso y atractivo, y ahora solo nos queda seguir esperando a que de verdad nos traigan algo que nos motive a viajar hasta el Distrito Federal. Porque créanme, somos muchos los bajacalifornianos que vamos exclusivamente a este festival. Y muchos lo seguirán haciendo porque ya se ha convertido en una costumbre bastante adictiva, pero los organizadores (OCESA) no deberían confiarse y tratar de mejorar para los siguientes años.
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